POR RUISEN
Un rostro redondo se caracteriza por sus líneas redondeadas. Elige un rostro con más bordes y esquinas, lo que dará una sensación de línea y podrá modificar la forma del rostro.
Un rostro cuadrado se caracteriza por estar bien definido. Generalmente, se puede usar una montura redonda para suavizar los bordes y las esquinas del rostro.
Un rostro alargado se caracteriza por una frente alta, donde el largo del rostro es mayor que el ancho. Generalmente, se recomienda elegir una montura ligeramente más corta que la forma del rostro, ya que equilibra mejor las proporciones y es adecuada para monturas redondas.
El rostro con forma de diamante se caracteriza por pómulos prominentes y una cara estrecha, tanto superior como inferior, que se puede mejorar eligiendo monturas con ojos en las comisuras de los ojos. Compatible con monturas cuadradas, trapecios invertidos y medias monturas.
Un rostro con forma de corazón se caracteriza por una parte superior ancha y una inferior estrecha, con pómulos prominentes. Puedes elegir una montura tan ancha como tu rostro para modificar su forma. Se recomiendan monturas redondas, ovaladas y cuadradas.
El rostro ovalado es la forma más versátil y perfecta. Cualquier montura queda bien; la elección depende de tus preferencias.
Hora de publicación: 17 de febrero de 2020